Acerca de los textos y la lectura

Una tarea habitual que Ud. realizará como estudiante, tal como hemos mencionado, será leer diferentes tipos de textos. La lectura, por lo tanto, será una actividad central que nos permitirá construir el significado de los textos fuente con el fin de alcanzar una comprensión propia de los temas tratados ya que, como lectores, interactuamos e interpretamos las ideas del autor.

Antes de avanzar sobre este tema, le proponemos revisar algunos conceptos básicos respecto a la naturaleza del texto y su potencial como medio para un aprendizaje enriquecido.

 

¿Qué es un texto?

Diversos autores definen al texto como: “conjunto de enunciados producidos en circunstancias espacios-temporales determinadas” (UNC, 2005: 6). Tal conceptualización nos lleva a considerar que un texto está conformado por un conjunto de ideas que aluden a personas, circunstancias y objetos como un todo con sentido, producido en un tiempo y espacio preciso.

Desde una concepción más amplia, podemos definirlo como una unidad de sentido dotada de coherencia y cohesión interna, con una intencionalidad comunicativa que se interpreta en un contexto determinado (Sabulsky y Roque Ferrero, n/d: 2). Esta noción incluye tanto las ideas que se expresan en el soporte impreso, en papel, como aquellas que hoy adquieren movimiento en nuestras pantallas, es decir, la narrativa digital.

Retomemos esta última caracterización para considerar qué se produce en el acercamiento entre el lector, como participante activo e inquisitivo en el proceso de aprendizaje, y un texto según sus características predominantes.

 

Un alto en el camino

Tercera parada: para comparar y reflexionar

“Las prácticas de lectura en relación con nuevos textos”

¿Qué diferencia hay entre un texto digital y otro presentado en soporte papel? ¿Qué lecturas hacemos a partir de cada uno? ¿Qué procedimientos debemos poner en juego para comprender la información que nos transmiten?

En este apartado, intentaremos discutir en torno a estas preguntas. Para introducirnos en el debate, lo invitamos a observar el video “Ayuda de Escritorio” a fin de reflexionar sobre las prácticas de lectura que involucran los nuevos tipos de textos.

 

 

Durante la visualización —y, posteriormente, al producir su aporte para el debate—, le sugerimos tener en cuenta los siguientes ejes de reflexión:

• ● ¿Qué le sucede al personaje Ansgar?
• ● ¿Cómo reaccionaría Ud. si estuviese en su lugar?
• ● ¿Vive o ha vivido alguna situación similar al enfrentarse a un texto en pantalla?
• ● ¿Considera Ud. que nuestros hábitos de lectura condicionan las posibilidades de comprender el sentido de los textos?

 

El texto como posibilidad de aprendizaje

Convertir al texto en posibilidad de aprendizaje implica acceder a su lectura para comprenderlo y hacer propia la información que nos provee; de este modo, podemos internalizarla y transformarla en conocimiento. Esto se logra, como ya señalamos, a través de la relación interactiva que establezcamos o mantengamos con el texto; de tal forma, en nuestro contacto con la fuente bibliográfica también ponemos en juego nuestros saberes e intereses.

La lectura apunta, fundamentalmente, a desentrañar y reconstruir las ideas que ha querido expresar el autor y que pueden ser reconocidas en un recorrido más o menos secuencial, ya sea avanzando paulatinamente entre sus páginas o bien navegando entre un enlace (o link) y otro, como hacemos en un texto digital o una página de Internet.

Comprender un texto implica desentrañar su significado, lo que supone:

• ● Identificar las ideas principales.
• ● Reconocer el hilo conductor en el tratamiento que se hace de las ideas.
• ● Reconocer y reconstruir la jerarquía y las relaciones entre las ideas.

De esta manera, la comprensión se convierte en una herramienta importante para el aprendizaje que se concreta a través de distintas acciones vinculadas con la tarea de leer. La forma en que se accede y se aborda el texto en su conjunto, así como las estrategias desplegadas para la identificación y procesamiento de los conceptos desarrollados, determinarán nuestro nivel de comprensión de los contenidos.